Esta receta de cheesecake es muy sencilla y no tiene muchos ingredientes, por lo que os la recomiendo si estáis empezando en la repostería. He probado muchísimas recetas de cheesecake pero desde luego ésta es la que más le gusta a mi hermana.
Seguro que a vosotros os encantará también!
Ingredientes para unos 10 mini cheesecakes:
100 g de galletas tipo Digestive trituradas
50 g de mantequilla derretida
400 g de queso tipo crema
200 g de chocolate blanco
3 huevos medianos
Arándanos para decorar o alguna mermelada que os guste
Utensilios principales para esta receta:
Moldes de silicona para muffins medianos
Un rodillo para triturar las galletas
Cazo mediano y recipiente para baño maría
¿Habéis tomado nota de lo que necesitamos? Vamos allá!
Elaboración
Triturar las galletas con la ayuda de un rodillo
Derretir la mantequilla a temperatura baja
Mezclar la mantequilla con las galletas trituradas y con esta mezcla cubrir los moldes (previamente engrasados con spray anti adherente o mantequilla) para facilitar el desmoldado.
Introducir en la nevera mientras preparemos la crema.
Derretir el chocolate blanco cortado en trozos al baño maría
Batir el queso e incorporar el chocolate una vez derretido. Mezclar muy bien
Incorporar a esta mezcla los huevos (uno a uno) lentamente hasta que estén bien integrados
Horneamos los cheesecake a unos 170ºC durante unos 30 minutos. El tiempo dependerá de cada horno, así que estar atentos!
Es importante dejar que se enfríen bien antes de meter en la nevera
Esta receta se puede hacer también en un molde desmontable de 18 cm. En este caso el tiempo de horneado será de unos 50-60 minutos.